No hay duda de que Casa Decor es un laboratorio de ideas en el que siempre hay espacios que sorprenden. No podía faltar el espacio de Strohm Teka, que en esta edición es un baño vestidor de 55 metros cuadrados, ni el ya tradicional encuentro con la prensa para que nos expliquen sus pormenores. Lo tuvimos este jueves, un día después de la inauguración oficial.

El proyecto, de Pilar García Ferrer (Pilsferrer Estudio), es orgánico en materiales. Hay un patrón de ondas generada por una gota de agua y las geometrías son curvas. Se va descubriendo el espacio paulatinamente. Para la encimera, se ha contado con piedras naturales, que cambian de color con el agua. Es decir, éste es un refugio de bienestar inspirado en la pureza del agua y adaptabilidad de las formas orgánicas.

Gemma Borrachero, directora de Marketing de Strohm Teka, recordó que las marcas tienen que traer un concepto, por ello han desarrollado una colección de grifería, Origehm, redonda, tubular. Su acabado es níquel cepillado. Su maneta acaba en forma de gota de agua, que es lo que inspira el espacio. Uno de los valores de esta marca "es el cuidado". Cuando te duchas, normalmente al acabar queda agua en el interior, y Strohm Teka en las columnas de ducha de esta colección incluye su sistema patentado Healthy, tecnología que permite evacuar el agua acumulada en la columna tras cada uso, evitando la proliferación de bacterias en el agua.

"Yo he diseñado casas con el total de metros de este espacio", bromeó García Ferrer. Buscó un discurso potente para el proyecto, con alusión al origen. Mostró con tablet en la mano las ondas de agua que recogen la geometría y genera el patrón de la onda. La más visual es una chimenea y las ondas del zócalo. Mostró cuál es el punto central del espacio. Hay zona de baño, de tocador, de lavabo, de bienestar, de vestidor y una zona más íntima de bidé e inodoro. La piedra es un travertino rojo. Se ha contado con piezas de anticuario por esa vuelta al origen, a la historia. Puso en valor el oficio de los carpinteros, ebanistas.

Se evoca a lo orgánico, por lo que se acompaña de naturaleza. Al techo le han puesto molduras. Hay una composición divertida con los espejos de la zona de lavabo. Borrachero hizo hincapié en la forma redondeada y en lo divertido que es no llegar y verlo todo de golpe, sino que hay que pasar por todo el espacio. Hay un contraste muy elegante, con toda la colección Origehm, sin líneas rígidas y versátil, como protagonista, con reducción de caudal y totalmente eficiente.

De esta manera, todo nace desde un punto central, desde el cual los volúmenes se elevan y configuran el espacio. El diseño en su conjunto evoca el impacto del agua al caer, una onda que simboliza tanto la esencia del proyecto como la inspiración detrás de la colección de grifería de Strohm Teka. El resultado es un espacio polivalente donde el momento de paz de un baño relajante en la bañera convive con la calidez del fuego de la chimenea incorporada en el ambiente. La bañera de mineral solid de textura suave y acabado mate destaca elevada sobre un pedestal de piedra, acompañada de grifería exenta de la colección.

Dentro de la zona de aguas y tras unas caídas de lino que aporta calidez se completa la colección con el inodoro y bidé suspendidos de Strohm Teka.

Se ha contado con proveedores cuidadosamente seleccionados que comparten la misma visión: Grato, especialista en tarimas de madera, ha desarrollado un suelo de roble natural siguiendo nuestro despiece, adaptándose con precisión a la geometría planteada.

En las zonas húmedas, Cupa Stone ha proporcionado el citado travertino que, en contacto con el agua, adquiere un matiz rosado-rojizo, entregando calidez y profundidad al espacio.

Las piezas únicas provenientes del anticuario Marsol e Hijos logran un diálogo entre lo antiguo y lo contemporáneo. Esta fusión de estilos refleja el interés por conectar al ser humano con sus raíces, con la artesanía y la historia.