IMCB 122

30 instalación y montaje en cocinas y baños E n un espacio multifuncional como es el de la cocina, en el que todo cambia para adaptarse a las nuevas tendencias y ne- cesidades de los consumidores, el grifo no iba a ser menos. Estilizadas figuras minima- listas y modernas en acabados clásicos como el cromo o el acero inoxidable, o metálicos como el blanco y negro mate, el gris metal u oscuro, se apoderan de la estancia para convertirla en una joya digna de admirar. El primer paso antes de seleccionar un tipo de grifo u otro pasa por decidir el lugar donde va a ir instalado, es decir, si se va a colocar en la encimera o en la pared. La primera opción es la más habitual. Aunque no debemos descartar el de modelo mural porque libera espacio en la encimera, aportando una sensación de ampli- tud en el lugar. En cuanto a su apertura existen también dos versiones: monomando y biman- do. El primero, como su propio nombre indica, cuenta con un único mando para el agua ca- liente y la fría. Existen modelos que, si se coloca la maneta en una posición determinada, por ejemplo, como puede ser la central, dan paso a la fría, reduciendo el consumo innecesario de la caliente. Por su parte, el segundo dispone de doble mando, dejando fluir una u otra según corresponda. ¿Caño alto o bajo? Depende. Si estamos ante un fregadero pequeño, mejor elegir un grifo con uno bajo, así evitaremos las temidas gotitas es- parcidas por la encimera. Sin embargo, si la pila es amplia y con profundidad, mejor decantarse por uno alto para no desentonar. Además, ob- tendremos un plus de practicidad, sobre todo cuando estemos lavando ollas o recipientes de gran tamaño. Estos últimos pueden encontrar- se en formato fijo o giratorio, proporcionando un mayor confort. Existen gamas que traen un aireador anti salpicaduras incorporado. Las griferías en acabados como el clásico cromo, PVD (Physical Vapour Deposition) acero inoxidable, el arriesgado blanco y el rompedor negro mate, centran la atención del espacio culinario De naturaleza diversa Hoy en día los monomandos son los que marcan tendencia junto con los de ducha extraíble, propio de los restaurantes de grandes chefs. Ergonómico y funcional a partes iguales, la manguera se libera de la estructura fija otorgando un margen de ma- niobra superior. ¿Por qué es una opción a tener en cuenta? Pues por su flexibilidad al permitir lavar grandes ollas de forma práctica y cómoda. Pero no es la única ventaja. Se puede llenar un recipiente con agua con tan solo tirar de su parte móvil o lim- piar frutas y verduras con gran facilidad. Algunos incluyen un sistema de imanes que contribuye a que este se retire a su posición inicial cuando se termina de usar. Además, se puede elegir el tipo de chorro deseado, según necesidad, fomentando así el consumo responsable de este recurso escaso. Esta grifería es idónea para cocinas americanas, is- las o aquellas con fregaderos amplios. Por si esto fuera poco, los flexibles tampoco se quedan atrás, puesto que se mueven en varias di- recciones. Con ellos se podrá acceder mejor a los recovecos interiores del fregadero para limpiar de forma más precisa y otorgar una mayor libertad a la hora de llenar recipientes. A veces encontrare- mos modelos que cuentan con esta doble funcio- nalidad: flexibilidad y caño extraíble. A esta lista también se unen los abatibles, pudien- do‘plegar’su caño. Es una práctica solución a tener en cuenta en aquellos hogares en los que la venta- na esté situada encima del fregadero, impidiendo que esta se abra adecuadamente. Este grifo con- tribuye a la movilidad al poder inclinarlo hacia de- lante. Gracias a su diseño se puede abrir la ventana sin problema. Higiene ante todo Pero si lo que quieres es ejercer un mayor control en la cocina, tu pieza adecuada será la electrónica. Está equipada con un sensor capaz de detectar la <<hansgrohe

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=