78 Aragón Con menos problemas de suministros y un comportamiento de los mercados exteriores que se mantiene en expansión, la industria aragonesa registró un primer trimestre del año extraordinariamente positivo e impulsó el Producto Interior Bruto (PIB) de la Comunidad un 4,2% en tasa interanual. La economía aragonesa recupera así el empuje anterior a la pandemia del coronavirus, como ha ocurrido en el conjunto de España, aunque persisten las dudas sobre la evolución del segundo y el tercer trimestre, con una inflación que sigue siendo elevada y una desaceleración del consumo y la inversión marcada por el elevado precio del dinero. El PIB aragonés creció en tasa intertrimestral tres décimas por encima de la media (0,9%, frente al 0,6%), mientras que supera con holgura -por dos puntos y nueve décimas- el 1,3% del conjunto de los países de la zona del euro, según las estimaciones provisionales publicadas por el Instituto Aragonés de Estadística (Iaest) y realizadas a partir de los datos revisados de la Contabilidad Nacional Trimestral registrados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La industria manufacturera, con el subsector de la automoción a la cabeza, sin olvidar el de los electrodomésticos, el de productos del descanso o el de los bienes de equipo, demostró su vigor entre enero y marzo. Su valor añadido bruto registró en ese periodo un crecimiento interanual del 6,5%, dato nueve décimas superior a la media del país (5,6%). En cuanto al sector servicios, según fuentes del Departamento de Economía del Gobierno Aragonés, su valor añadido bruto crece el 3,9% respecto al mismo trimestre de 2022, seis décimas por debajo del registro promedio nacional (4,5%). Sin embargo, la principal rama de comercio, transporte y hostelería se incrementa en Aragón el 10,8% anual durante los tres primeros meses de 2023, frente al aumento del 10,1% experimentado por el conjunto nacional. Jesús Arnau, director general de la patronal CEOE en Aragón, ha llamado la atención sobre el comportamiento de la industria y de la citada rama de los servicios, la directamente vinculada al turismo, como los dos sectores económicos que impulsaron el PIB regional al 4,2%. A ello ha añadido las “espectaculares” cifras de exportación, determinantes también en esta reactivación económica. Pese a esos datos, el portavoz de la patronal aragonesa quiso llamar a la prudencia y adelantó que, en abril y mayo, darán cuenta de una posible ralentización económica como consecuencia de la desaceleración del consumo y la reducción de la inversión. En ambos casos, ha apuntado, marcados por una inflación que, aunque más contenida, sigue siendo alta, y unos tipos de interés que parece que no han tocado techo. “En Aragón crecemos más porque veníamos de más abajo, pero la cesta de la compra sigue estando demasiado cara y afecta a todos los ciudadanos”, ha indicado. “Es una buena noticia volver al nivel de antes de la pandemia”, ha señalado por su parte María Jesús Lorente, presidenta de Cepyme Aragón, que en su caso recalcó que lo más positivo de todo es que “la oferta y la demanda empiezan a equilibrarse”. Eso es lo que necesitan las empresas, ha incidido: que no haya desequilibrios y puedan trabajar con normalidad. En opinión de la líder de las pequeñas y medianas empresas aragonesas, el segundo trimestre “también será aceptable”, pero ha reconocido que los precios en general se mantienen “por encima de lo razonable”, de ahí que considere acertada la decisión del Gobierno central de mantener reducido el IVA de los alimentos, aunque vuelva a dejar fuera a la carne y al pescado. En cualquier caso, ha considerado el incremento del 4,2% del PIB como un buen dato. Por su parte, Juan Arceiz, líder de UGT en Aragón, ha recalcado que el crecimiento del 4,2% del PIB es una estimación. También ha valorado que la Comunidad se sitúe a la par que el conjunto del país en crecimiento económico (hasta ahora iba por detrás), pero ha indicado que a su sindicato le preocupa la caída del consumo al por menor, que está relacionada con las últimas subidas de tipos de interés. “Hay que revisar esa política, que nosotros vemos claramente desacertada”, ha apuntado sobre los incrementos del precio del dinero dictados por el BCE. Ibercaja ha revisado al alza el crecimiento del PIB en Aragón para el 2023, situándolo en el 0,9% frente al 0,1% que había estimado en el anterior informe económico. Pese a este aumento, la comunidad crecerá por debajo de la media española, que se prevé que sea del 1,2%. Las previsiones de crecimiento para el año 2024 son también moderadas, pasando del 2,6% inicialmente previsto al 1,1% en el caso de Aragón y del 2,6% al 1,5% para el conjunto de la economía española, según se recoge un informe publicado la ‘Revista Economía Aragonesa’ editada por Ibercaja. Esta revisión de las previsiones que anteriormente había realizado Ibercaja se debe a una menor repercusión de la crisis energética en Europa, hecho que ha permitido esquivar los escenarios más negativos previstos a finales del año pasado, dentro de un contexto en el que continúan las tensiones inflacionistas y la subida de los tipos de interés son una nueva amenaza para la economía. El PIB aragonés creció en tasa intertrimestral tres décimas por encima de la media (0,9%, frente al 0,6%)
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