54 posibilidad de un baño de burbujas con chorros de aire que permiten tener la sensación de estar en un spa dentro de nuestro propio hogar. Materiales duraderos En cuanto a los materiales con que están fabricadas, cabe destacar que las bañeras de hierro fundido se han convertido, en los últimos años, en las favoritas si lo que queremos es dotar a la estancia de un estilo más clásico. Además, gracias a su resistencia y durabilidad, si bien están recubiertas en toda su superficie por un fino esmalte en forma de pasta, su principal ventaja es que, en caso de sufrir un golpe o rayadura, el esmalte puede repararse con facilidad. Por el contrario, su gran peso puede considerarse como una desventaja, ya que no puede moverse con facilidad, en caso de que, en algún momento, quisiéramos cambiar de ubicación los distintos elementos del cuarto de baño. Por su parte, las bañeras acrílicas tienen numerosas ventajas, entre ellas, el hecho de que, al ser muy ligeras, son fácilmente manejables y, por ende, mucho más fáciles de instalar. Asimismo, al tener una superficie totalmente lisa, de un tacto cálido y suave, permite que la limpieza sea más sencilla y no se ensucie tanto como otros modelos de otros materiales. También son bastante resistentes a los golpes, impactos y arañazos, mantienen mejor la temperatura del agua, no cambian de color con el paso del tiempo y poseen una elevada durabilidad, alrededor de 20 años. Otro de los materiales utilizados a la hora de fabricar bañeras es la piedra, material fuerte y duradero por excelencia, características que se convierten en su principal ventaja, además de que conserva mejor el calor. Eso sí, como desventajas podemos enumerar que el color de las bañeras hechas de piedra puede variar ligeramente con el paso del tiempo, pesan mucho (por lo que no podrán moverse del lugar exacto en el que la ubiquemos), y su precio suele ser bastante elevado. Otro elemento a tener en cuenta a la hora de decantarnos por ubicar una bañera es la grifería. Sobre todo, porque los grifos de las bañeras no son solo un elemento funcional, sino que ayudan a definir el estilo y la atmósfera del espacio, proporcionando una experiencia única, tanto en funcionalidad como en estética. En el caso de los grifos monomando se trata, sin duda, de la elección más popular y extendida en los cuartos de baño, especialmente por su facilidad de uso y su diseño elegante. Al permitir un control preciso de la temperatura y del flujo del agua con un solo mando es una opción muy práctica. El grifo empotrado también se erige como una de las posibilidades más demandadas últimamente, ya que se cuenta con un diseño que se integra en la pared, ofreciendo una estética limpia y moderna. Pero si queremos dotar a nuestro espacio de baño de un estilo elegante y con un toque de distinción, nada mejor que un grifo dorado para la bañera. Gracias a su acabado brillante y elegante, la grifería dorada es perfecta para crear una atmósfera lujosa. Por último, cabe destacar el grifo para bañeras exentas, cuyo diseño sofisticado, disponible en varios estilos, combina a la perfección con este tipo de modelos. <<Acquabella Las bañeras rectangulares son los modelos más clásicos y versátiles, y la característica principal es que se adaptan a cualquier estilo
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