61 cones con arquerías corridas en la segunda planta y en el torreón delantero. En el palacete encontramos muchos cupidos y ángeles como guiño al nombre de su primera propietaria. Su fachada noreste da a un coqueto jardín cuadriculado, salpicado de esculturas. En esta fachada, la más cálida de la casa por su orientación, se encontraban los aposentos de la propietaria en la primera planta, con una terraza volada y cerrada, tejadillo y decoración cerámica. Asimismo, se aprecia la nave del oratorio, añadido un año después en el antiguo porche del jardín, a modo de ábside con cúpula y cubiertas con pináculos. La decoración del oratorio es muy sevillana, con zócalo de cerámica. Al palacio se accede a través de un soportal aterrazado, que da paso a un doble vestíbulo con escaleras de mármol, techo de bovedillas y una hermosa cancela de rejería de estilo sevillano. El acceso a la primera planta se realiza por las señoriales escaleras del hall principal, dispuestas en tres tramos y con peldaños de mármol. La barandilla y los arcos, de piedra artificial y escayola, llevan un exuberante trabajo escultórico, realizado por maestros artesanos de primer nivel. Por todo esto, una de las singularidades de la edición Casa Decor 2024 fue el recorrido de la exposición, que transcurría por exteriores e interiores. Primero los jardines, después el Palacete y, finalmente, el Pabellón de Invitados. Desde la entrada por Francisco Silvela, se accedía a través del gran portalón principal directamente a los jardines. En la explanada del jardín, ya se encontraban los primeros espacios, que invitaban a iniciar el recorrido subiendo el camino, entre árboles, plantas e instalaciones florales. De ahí, el visitante continuaba rodeando el Palacete, hasta completar la vuelta entera antes de llegar a la señorial entrada. En total, eran ocho espacios exteriores, de gran amplitud y muy variadas propuestas. En el Palacete se intervinieron la planta baja, la primera y la segunda, con un total de 24 espacios que bordeaban el perímetro del edificio. Finalmente, al salir, el visitante entraba, a través de un coqueto puente, al Pabellón de Invitados. Con dos plantas, había once espacios proyectados, entre ellos, las zonas sociales de Casa Decor: el Restaurante y el Auditorio. El evento atrajo a unos 45.000 visitantes, un 12 % más que en la edición anterior
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