100 Demanda del sector baño Millones € Demanda del sector cocina Millones € Total España 3.664 Total España 3.593 CASTILLA Y LEÓN EXTREMADURA 87,67 89,4 208,48 204,44 La economía extremeña ha crecido un 1,9 % en 2023: por sectores, el aumento ha sido generalizado, con tasas entre el 1,6 % de la industria y el 7,3 % del sector agrario afiliación a la Seguridad Social muestra avances muy similares a los de España en el primer trimestre de este año, con incrementos especialmente significativos en algunas áreas urbanas capitalinas. Los datos de exportaciones y de producción industrial confirman que el buen tono de la actividad seguiría en el arranque del año, gracias a la recuperación del sector automotriz. El gasto con tarjeta avanza, más en los servicios de transporte, alojamiento y bares y restaurantes, apoyado por el buen comportamiento del turismo nacional y extranjero. Esto se estaría viendo también en la inversión: tanto las importaciones de bienes de equipo como los visados para edificios de uso no residencial evolucionan positivamente. Cabe señalar, asimismo, que el crecimiento se mantendrá fuerte en 2024, pues el PIB podría aumentar un 2,0 % (España 2,1 %). La economía europea parece haber tocado fondo y podría mostrar una progresiva mejora durante el año. La economía regional depende crucialmente de que se mantengan las ventas de bienes a la eurozona y los mayores márgenes pueden dar paso a aumentos en la inversión y en los salarios. Y, de cara a 2025, BBVA research prevé que el PIB de Castilla y León modere su avance y que el crecimiento se sitúe en el 1,8 % (2,0 % en España). Esto, como consecuencia de un entorno de escasez de mano de obra y aumento de los costes laborales, sin que se perciban avances importantes en la productividad. La inmigración podría no ser suficiente para compensar la atonía del mercado laboral nacional y cubrir todas las vacantes, en particular en el sector secundario, demandante de mano de obra más cualificada. Por otro lado, el empleo en servicios de alto valor añadido continúa en niveles muy bajos comparado con otras comunidades. Por último, la incertidumbre de política económica puede aumentar hacia delante. Serán importantes las medidas que tengan que ser implementadas para reducir el déficit público. De cumplirse estas previsiones, la tasa de paro se reducirá hasta el 8,3 % y se pueden crear 27.000 nuevos empleos. En este escenario, Castilla y León podría ser la comunidad que experimente un mayor crecimiento del PIB per cápita entre 2019 y 2025. Pero existen riesgos: la pérdida de complejidad de los bienes exportados puede traducirse en un freno a las exportaciones futuras. Además, es necesario avanzar en un proceso de consolidación de las cuentas autonómicas al mismo tiempo que se garantiza la provisión de servicios públicos. La falta de capital humano debe ser resuelta incrementando los recursos dedicados a la formación de parados, mejorando su eficiencia y colaborando con las empresas. En resumidas cuentas, en el conjunto de 2023 la economía de Castilla y León se situó entre las comunidades más dinámicas gracias a la fortaleza de las exportaciones de bienes y de la producción industrial. Los primeros datos de 2024 apuntan a que el crecimiento se mantiene en línea con el promedio nacional, y el repunte esperado en la inversión de cara a 2025 podría suavizar la desaceleración del PIB. Extremadura, a la cola del PIB nacional Respecto a la situación de Extremadura, el quinto número del informe ‘Previsiones Económicas de Extremadura’, que, como en ediciones anteriores, ha sido elaborado por Unicaja a través de Analistas Económicos de Andalucía, analiza la evolución reciente de la economía extremeña. En primer lugar, según los datos de la Contabilidad
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